Te compras un reloj nuevo, te abres Strava, conectas TrainingPeaks… y de repente tu entrenamiento se convierte en una sopa de números: carga, estrés, fitness, forma, VO2max, Body Battery, Training Status, TSS, CTL, ATL, gráfico de Fitness & Freshness…
Es fácil acabar mirando todo menos lo que de verdad te hace correr más rápido y más fuerte. Si estás pensando en renovar tu dispositivo, es fundamental saber cómo elegir reloj running que se adapte a tus necesidades y no te abrume con datos que no vas a usar.
En este artículo vamos a poner orden. Vamos a ver, de forma muy práctica, qué métricas merece la pena vigilar en Garmin, Strava y TrainingPeaks, cuáles son secundarias y cuáles puedes ignorar casi siempre. Y, sobre todo, cómo usarlas para tomar decisiones reales de entrenamiento.
Antes de nada: por qué no tienes que mirar “todo”
Cada plataforma nace con una lógica distinta:
- Garmin piensa en tu día a día: pasos, sueño, salud general y entrenamiento.
- Strava piensa en la parte social y motivacional: compartir, comparar y picarte “con cabeza”.
- TrainingPeaks piensa como un entrenador friki de los datos: planificar cargas, picos de forma y temporadas.
Si intentas exprimirlo todo a la vez, se te mezclan mensajes. Tu objetivo con estas aplicaciones debe responder a tres preguntas:
- ¿Estoy entrenando suficiente para mejorar?
- ¿Me estoy pasando y me acerco a la lesión o al petardazo?
- ¿Llego fresco a mi carrera objetivo?
Para eso necesitas pocas métricas bien elegidas, no 30 compitiendo por tu atención.
Métricas básicas que importan siempre
Da igual que uses Garmin, Strava o TrainingPeaks: hay datos básicos que nunca pasan de moda y que deberían ser el centro de tu análisis, especialmente si eres corredor amateur con poco tiempo:
- Distancia total semanal (km).
- Tiempo total de entrenamiento semanal (minutos/horas).
- Ritmo medio de los rodajes fáciles (clave: aplicar el correr lento para correr rápido).
- Frecuencia cardiaca media en los rodajes fáciles.
- Sensaciones o RPE (percepción del esfuerzo): muy fácil / cómodo / exigente / al límite.
- Número de sesiones de fuerza a la semana. Recuerda que el entrenamiento de fuerza para corredores es innegociable para el rendimiento.
Con estas pocas variables ya puedes ver si entrenas con regularidad. A partir de ahí, las métricas avanzadas (Training Load, TSS, Fitness, etc.) son capas extra que dan contexto.
Garmin: qué métricas mirar de verdad
Garmin es la puerta de entrada para la mayoría de corredores. En Garmin, céntrate sobre todo en:
- Ritmo por kilómetro y tiempo total de la sesión.
- Frecuencia cardiaca media y por zonas (especialmente en rodajes suaves).
- Cadencia (como referencia, no como obsesión).
- Training Load o Carga de Entrenamiento: te muestra la carga de los últimos días/semana. Lo útil es la tendencia: si se dispara, estás en zona de riesgo.
- Training Status: Productive, Maintaining, Unproductive. Úsalo como “opinión” del reloj, no como sentencia.
- VO2max estimado: como tendencia a semanas/meses.
En los modelos más recientes también aparecen métricas como HRV Status, Body Battery o Training Readiness. Son útiles para decidir si ese día haces el entreno fuerte programado o lo cambias por un rodaje suave.
Garmin: métricas que puedes relativizar (o casi ignorar)
- Race Predictor: suele ser demasiado optimista.
- Recovery Time: puede orientar, pero no conoce tu vida real (trabajo, estrés).
- Body Battery como único criterio: está bien mirarlo, pero no bases todas tus decisiones en él.
- Calorías quemadas y pasos: interesantes para salud general, pero irrelevantes para mejorar tiempos en competición.
Strava: de la “red social” a herramienta de entrenamiento
Strava está pensada para compartir, comparar y motivarte. En Strava, qué merece la pena vigilar:
- Ritmo medio, vueltas y parciales de tus entrenamientos clave.
- Gráfico de altimetría: para interpretar si un ritmo más lento se debe a subidas.
- Relative Effort / Training Load: cuantifica cuánto “te ha costado” una sesión.
- Fitness & Freshness (si tienes acceso): usa tu Training Load para dibujar cómo evoluciona tu forma a lo largo de las semanas.
Y qué puedes relativizar mucho:
- Kudos y comentarios: no dicen mucho sobre si tu plan tiene sentido.
- Suffer Score: gamificación pura.
- Compararte con todo el mundo: Tu contexto no es el de los demás.
TrainingPeaks: cómo entender TSS, CTL, ATL y compañía
TrainingPeaks es la herramienta donde más fácil es perderse si entras sin guía. Es ideal para planificar semana de entrenamiento y controlar las cargas con precisión. Las métricas clave son:
- TSS (Training Stress Score): mide la carga de cada entrenamiento combinando duración e intensidad.
- IF (Intensity Factor): cuánto de intenso ha sido el entrenamiento respecto a tu umbral.
- CTL (Chronic Training Load) o “Fitness”: refleja tu carga media de las últimas semanas.
- ATL (Acute Training Load) o “Fatigue”: refleja la carga reciente (pocos días).
- TSB (Training Stress Balance) o “Form”: es la diferencia entre CTL y ATL.
Lo importante aquí no es que te aprendas las siglas, sino entender la idea: la plataforma intenta dibujar cómo va tu forma física en el tiempo.
TrainingPeaks: errores típicos
- Mirar el TSS como si fuera una nota de examen.
- Querer subir el CTL a toda velocidad: riesgo de lesión.
- Obsesionarte con “estar siempre en verde”: tiene que haber fases de cansancio y fases de frescura.
Qué métricas ignorar sin remordimientos
En general, puedes relajar la atención en cualquier métrica que no entiendas, los numeritos diarios de “fitness” si estás en taper, y las comparaciones directas con otros corredores.
Si una métrica te genera ansiedad, seguramente sobra en esta fase. Primero consolida hábitos; luego afinaremos.
Cómo elegir tus 5 métricas clave según tu perfil
Para que lo veas más claro, una propuesta práctica:
Corredor/a principiante:
- Frecuencia de entrenamiento.
- Minutos totales de carrera suave.
- Ritmo y pulso de rodajes fáciles.
Corredor/a intermedio:
- Volumen semanal.
- Una métrica de carga (Training Load o TSS).
- Ritmo de entrenamientos clave respecto a objetivos.
- Si dudas sobre cómo estructurar esto, a veces lo mejor es elegir un plan de entrenamiento online que ya te marque las pautas.
Corredor/a avanzado:
- Todo lo anterior, vigilando CTL y TSB para el taper.
- Si tu gran miedo es fallar el día clave, te ayudará repasar nuestro manual anticolapso día carrera para gestionar la estrategia y la cabeza.
Consejos prácticos para no volverte loco con los datos
- Define tu pregunta antes de mirar el reloj: ¿Quiero ver si he cargado demasiado? Busca solo ese dato.
- Mantén tus pantallas de carrera sencillas: Ritmo, distancia, tiempo y frecuencia cardiaca.
- Revisa las métricas “gordas” una vez por semana: Reserva 15 minutos el domingo para ver el volumen total y la carga.
- Escucha primero a tu cuerpo: Si el reloj dice “unproductive” pero te encuentras bien, haz caso a tus sensaciones.
- Apoya tus decisiones en un plan: Las métricas verifican el plan, no lo sustituyen.
Cierre: pon los datos a trabajar para ti
Usar bien las métricas no va de ser más friki que nadie, sino de simplificar decisiones. Garmin, Strava y TrainingPeaks pueden ser el mejor cuaderno de entrenamiento si tienes un plan detrás.
En PlanMeta Running trabajamos justo en eso. Si quieres que te ayudemos a decidir qué métricas mirar, planificar tu temporada y llegar a tus carreras con la cabeza tranquila, puedes contactar para elegir un buen entrenador personal online y que lo veamos en detalle.
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